Coartada para seguir
mintiendo o consuelo para presentar a quien se ha vencido,
no hay unanimidad,
consérvala en esas latas,
en las paredes bien iluminadas en un punto, y distrae a quien llegue en busca
de entender por qué cae por la escalera sin decir nada,
será por el
arrepentimiento poco poético y falso que acarrea hasta el centro las figuras
que abordan las circunstancias aceptables.
Es poco corriente esta
grieta pero por ella resbalan los necesitados hacia el magma imperfecto,
pueden ser objetos, llamémoslos
objetos, los que hagan explotar en el subsuelo el hambre,
hambre para fundir el
maná,
hambre que también tiene objetos
encadenado a las mismas reclusas que tañeron a borbotones para mi este mundo,
espera en el índice de un
instante para romper los bordes,
acaba heroicamente con el
águila, el arrepentimiento, la nieve, los atlas, las bolas de nácar,
tantas cosas digeridas,
maldecidas en el insomnio al que me miro, que me arregla para parecerme al foso
donde la memoria me arrastró,
defecando de alegría
cuando una nueva palabra se ha cruzado en mi camino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario